Preikestolen, una de las maravillas naturales más emblemáticas de Noruega, atrae cada año a miles de visitantes de todo el mundo. En el verano de 2022, 348.000 personas hicieron senderismo hasta esta impresionante meseta montañosa. Estos visitantes tuvieron un importante impacto económico en la región, con un gasto total de mil millones de coronas noruegas durante los meses de junio, julio y agosto.
La Fundación Preikestolen realiza anualmente minuciosas encuestas entre los visitantes, que proporcionan valiosos datos sobre su perfil. La edad media es de 34 años y la mayoría son europeos. Hay una distribución más o menos equitativa entre hombres y mujeres, y los visitantes suelen viajar acompañados. Llegan a Preikestolen principalmente en coche, coche de alquiler o autocaravana y pasan una media de tres días en la región de Ryfylke/North Jæren, con alojamiento en la zona de Stavanger antes y después de su visita.
También cabe destacar que 36% de los visitantes visitan o planean visitar otras partes de Lysefjorden, y la friolera de 91% están satisfechos o muy satisfechos con su experiencia tras su visita a Preikestolen.
En cuanto al gasto, los datos de Innovation Norway revelan que los turistas noruegos gastaron una media de 990 coronas al día, mientras que los visitantes extranjeros gastaron 1.240 coronas al día en 2019. Combinando esta información con el número de visitantes y la duración media de su estancia, podemos estimar que el tráfico de Preikestol generó más de mil millones de coronas noruegas en gasto en Rogaland durante los meses de verano de 2022.
La importancia económica de la atracción de Preikestolen es, por tanto, evidente. Los ingresos tienen un efecto dominó positivo en hoteles, restaurantes, servicios de transporte y empresas locales, contribuyendo al fortalecimiento de la economía de la región. Con Preikestolen como piedra angular del turismo en Ryfylke y Jæren Septentrional, es evidente que esta maravilla natural desempeña un papel crucial en la promoción del crecimiento económico de la zona.
